martes, 21 de enero de 2014

Vaharadas de mierda humana

Hay un sin_techo atravesando la terraza de la Mallorquina. Pelo y barba blancos, andrajoso y caminar artrítico. El pobre hombre va dejando una vaharada a mierda humana entre los desayunos humeantes. La gente mira y pone cara de circunstancias en cuanto detecta el origen del malestar. Quiero decir que no es un olor a mierda cualquiera, no. El pobre hombre huele a mierda humana pisoteada diez o doce veces… y eso cuadra muy mal con un respetable café y tostada.


El hombre es uno de los desechos humanos que genera esta mierda de sistema codicioso. Es un sistema económico que especula con el bienestar de la gente para hacer más poderosos a los ricos y más pobres a los pobres, hasta dejarlos al borde de la subsistencia. El hombre que deja vaharadas de mierda pisoteada en la terraza de la Mallorquina es uno de los millones de pobres que ha generado la crisis al mismo tiempo que enriquece vilmente a los pocos que ya eran ricos. El informe de Osfam Intermón lo deja bien claro: a nivel mundial, 85 personas ricas suman tanto dinero como 3.570 millones de pobres del mundo… ¿CÓMO ES POSIBLE QUE PERMITAMOS ESTO? ¿Por qué los políticos que me representan no se plantan en mitad de la conferencia y acusan al criminal?
…pero al cabo de dos minutos ha pasado todo. El olor a mierda se ha extinguido, la misericordia, la indignación y las ganas de matar a alguien —a ver si así se arregla algo— han pasado. Todo se ha disuelto como un azucarillo. El andrajoso que huele a mierda ya no es visible, el café vuelve a aromatizar la terraza de la Mallorquina y el informe sobre la desigualdad exponencial vuelve a ser un titular más que ya no sirve ni para envolver el pescado de estero…
…nos lo merecemos.



No hay comentarios: