martes, 1 de mayo de 2007

La responsabilidad de la señora Gül

Turquía es una república parlamentaria laica con una población de mayoría musulmana. Lo es desde 1923, y desde entonces están empeñados en la modernización del país. Entre otras cosas las trabajadoras de la administración pública tienen prohibido usar el velo islámico en su puesto de trabajo, y tampoco se permite su uso a las mujeres turcas dentro de edificios oficiales.

Actualmente, el parlamento turco (sede del poder legislativo) está en manos de un partido islamista que se autodenomina moderado, el Partido de la Justicia y el Desarrollo. El primer ministro (cabeza del poder ejecutivo) es el islamista moderado, señor Erdogan. Posiblemente mañana sea elegido Presidente de la República el señor Gül, otro islamistamoderado. Por el momento, el poder judicial se mantiene independiente... pero los sectores laicos de Turquia no se fían ni un pelo de estos sujetos (sobre todos el propio ejército) y están intentando por todos los medios que el señór Gül NO sea elegido presidente.

Este homo sapiens venido a menos se pregunta ¿qué hacen unos islamistas gobernando un país laico? Lógicamente, intentar islamizarlo, lo mismo que un gobierno socialista buscaría el socialismo, y uno liberal el liberalismo. Si eso es lo que quiere la mayoría del pueblo turco, sea. ¡Pero deben seguir abiertos los cauces democráticos para un posterior cambio de la dirección política! Y ese es el problema porque islamizar un país es tender a que las leyes se adecuen a la sharía, y al final del proceso llegar hasta ser gobernados directamente por la sharía... y eso no tendría vuelta atrás porque democracia y leyes islámicas no casan.

Valga un ejemplo del proceso que se avecina en Turquía, país laico que pretende ingresar en la Unión Europea. La señora Gül, doña Hayrünnisa, futura primera dama de la república, es una defensora a ultranza del velo islámico y ha declarado que lo usará en sus apariciones oficiales. Eso sí, son lujosos pañuelos de seda, estampados de Hermés y fulares dorados diseñados por Dior. Hasta tal punto es amante del velo que se negó a quitárselo para asistir a las clases de la universidad de Estambul. Fue expulsada por ello y sus recursos contra la expulsión llegaron hasta el Tribunal Internacional de Derechos Humanos... recurso último que también perdió. La señora Gül, doña Hayrünnisa, prefirió renunciar a su carrera universitaria antes que a sus lujosos velos islámicos. Y actualmente, el ejemplo lo sigue su hija, que para poder estudiar en una universidad turca se despoja de su velo, pero se endosa en la cabeza, para cubrir su cabellera, orejas y cuello, una estrambótica peluca. La niña cumple estrictamente con la ley... pero con cachondeito.

Yo diría a las mujeres del posible próximo presidente de Turquía que el velo islámico que tanto aman es heredero del burka afgano que priva a las mujeres de todos sus derechos...

Imágenes duras de la mujer afgana esclavizada dentro de su burka,
la máxima expresión del velo islámico. Pero también son imágenes
cargadas de esperanza.

Les diría que el velo que tanto aman, también es heredero del que se ven obligados a usar las mujeres iraníes para recibir cualquier derecho.

FALTA VIDEO

Este video sería desternillante... pero no lo es. Son las imágenes patéticas
del sometimiento de la mujer islámica. Y el velo es el símbolo.

Les diría a las mujeres del señor Gül que el velo islámico que tanto aman, aunque sea de seda y diseño, significa la sumisión de la mujer al hombre, y que usarlo en el palacio presidencial turco es retroceder un siglo...

...y hacen muy bien los turcos en desconfiar de estos islamistas moderados, que demoderados no tienen nada, solo guardan las formas para copar los tres poderes de la inestable democracia turca y someterla a un retroceso de siglos.

Y así no pueden ingresar en la Unión Europea. Sería un suicidio.

Post scriptum: El Tribunal Constitucional turco invalida la elección del candidato islamista
Erdogan adelanta las elecciones como respuesta al veto del Constitucional
Habrá que seguir este asunto.




No hay comentarios: