lunes, 29 de octubre de 2012

...a veces los hombres estorbamos

Camino de Irati / 1 de 4
...al final del camino de tierra, en lo más profundo de Soria, hay una aldea minúscula que se llama Pedro. Algún hecho histórico ocurrió en este lugar, pero no recuerdo exactamente qué fue. Una pequeña iglesia hispano-visigoda se eleva en un extremo de las casitas de adobe. Está cerrada a cal y canto porque atesora una cruz gótica de plata muy singular.
Hay un Castaño de Indias junto a la puerta del templo, y tapiza el suelo con sus frutos. Son unas castañas redondeadas y lustrosas. Se pelan muy bien y tienen una carne jugosa y ligeramente dulce… ¡Qué pena que también sean demasiado amargas!
No hay nadie en muchos kilómetros a la redonda. Los campos están vacios y la aldea también... y uno acaba entendiendo que a veces los hombres estorbamos.
Mirad este audiovisual, y no hagáis caso si el antivirus protesta, que a veces los antivirus son un poco tontos…

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