1.- El pensamiento económico que hoy es mayoritario en Europa —el que lideran Merkel y Zarkozy, en sintonía con Hayek y Friedman— impone a los países del euro políticas económicas de austeridad. Estas políticas —en lugar de aumentar la recaudación mediante la progresividad fiscal a las rentas más altas y a los beneficios empresariales, o en luchar agresivamente contra el fraude y los paraísos fiscales— se plasman en una reducción drástica de la inversión pública, en la congelación de pensiones y salarios públicos y en la privatización de empresas públicas (…y me temo que esto sólo es el principio del principio)
2.- ¿Qué se consigue con esto? Que el dinero que ya no se invierte en sanidad, educación y mantenimiento de carreteras, por ejemplo, se utilice para devolver la Deuda contraída y tranquilizar a los especuladores que nos prestan lo que no recaudamos en España. Es decir, de esta forma se consigue tranquilizar a los mercados, se consigue que la prima de riesgo no suba demasiado y que los intereses a pagar por la Deuda sean llevaderos.
3.- ¿Qué pasa entonces, Arturito? Pasa que como no hay inversión pública debido a los recortes que nos imponen, ni los bancos dan crédito a las personas ni a las pequeñas y medianas empresas —y no lo dan porque cada uno de ellos tiene muchos cadáveres descompuestos en la trastienda— entonces ningún estímulo tira de la economía productiva (ni se gasta, ni se produce, ni se consume lo suficiente) Pero no solo NO crecemos, si no que hemos entrado en recesión. Y si la economía del país se retrae, recaudaremos menos impuestos y será más difícil devolver la Deuda… a no ser que se aumenten los recortes. La pescadilla que se muerde la cola.
4.- Y entonces, como las políticas de austeridad que nos imponen Merkel y Zarkozy estrangulan la inversión pública y NO generan actividad económica… vienen los mercados y dicen: Si España no va a crecer con esta política, ¿de dónde van a sacar el dinero para devolver la Deuda? ¿Lo vas pillando, Arturito?
5.- Lógicamente —piensan los especuladores—, si hay más dificultad para devolver la deuda, la prima de riesgo tiene que aumentar y, por tanto, los intereses que me darán por mis préstamos serán más jugosos. ¡Esto es justamente lo que conviene a los especuladores que viven de esto, y harán lo posible y lo imposible para que siga ocurriendo! Y así, cada vez que subastamos Deuda, van subiendo la prima de riesgo y los intereses… y para poder devolverlos hay que hacer mayores reducciones de la inversión pública —con el consiguiente desamparo de la gente más desfavorecida— que desaceleran la actividad económica y provoca menores ingresos para el Estado. Y eso ocurre hasta que los intereses que tengamos que devolver son tan elevados que sea imposible hacer frente a la Deuda. Esto es muy malo para el país, pero es un estupendo negocio para los especuladores. ¿Es ético que se gane dinero con el sufrimiento de la gente? Pues fíjate, Arturito, son tan listos que nos están convenciendo para que ni siquiera nos hagamos esa pregunta.
6.- ¿Qué se hace entonces? Fácil, hijo mío: se rescata al país, abierta o solapadamente. Que es como vender el alma al diablo, literalmente. No es que traigan dinero a espuertas para resolver la penuria de la gente, recuperando la dignidad de la sanidad o la educación públicas, no es eso, es todo lo contrario… lo que hace el Rescate es asegurar que los acreedores —bancos y entidades financieras, especuladores todos— reciban su dinero puntualmente. Ni más ni menos… a cambio de lo que sea menester, no importa que miles de enfermos se queden sin tratamiento, o que miles de familias se queden en la calle o sumidos en la miseria. Eso no importa, lo que hay que hacer es mantener nuestros compromisos adquirimos por encima de todo. Eso debe ser lo que mi abuelo llamaba honor… supongo. ¿No?
7.- ¿A cambio de qué? Buena pregunta, Arturito, veo que me sigues. Porque nadie regala nada, y menos este tipo de gente. El dinero del Rescate (que es una cantidad obscena e incomprensible) va directamente desde el FMI, BCE y Bancos Privados a nuestros acreedores, sin pasar por manos españolas (…no vaya a ser que se desvíen hacia tratamientos de radioterapia, por ejemplo) Y para que ese trasvase de capital ocurra, nuestros gobernantes se comprometen a entregar todos los servicios públicos del país a negociantes privados (amiguetes por lo general), a privatizar todo el patrimonio histórico y cultural de España, a vender la gestión del agua, de las carreteras, de los Parques Naturales, etc., etc., etc. Malvenderán el país al mejor postor y los ciudadanos empobrecidos seremos inquilinos en nuestra propia casa… Es gente muy peligrosa, Arturito. Para ellos, si no te sometes, eres un estorbo.
8.- ¿Te das cuenta? La jugada es redonda. Los poderes financieros, es decir, los que manejan el dinero y han provocado esta crisis, tienen además todas las herramientas para someternos a la esclavitud económica e intelectual. Los gobernantes más poderosos de la Tierra —amparados en nuestros votos y nuestra complacencia— son sus cómplices y hacen las leyes que conviene a esa gente. Pueden privarnos del discernimiento, y lo están haciendo, con un par de campañas de intoxicación mediática y con un nuevo lenguaje que nos priva de los conceptos. Y lo hacen sin pestañear… convenciéndonos de que votando cada cuatro años somos libres. No sé a qué mundo nos estamos acercando, al de Huxley o al de Orwell… Sea cual sea, no me gusta nada.
Somos idiotas, Arturito. Que no te quepa la menor duda. Sí, sí, tú ríete y sigue así, sacando las banderas cuando ganan unas elecciones… que te van a solucionar la vida.
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