…pero eso sería elucubrar. La realidad es que esta guapa y digna dama se colocó delante del objetivo; y que el sol tangencial de invierno dibujó las marcas del tiempo, y que la imagen resultó con tres planos de luz.
Y que me quedé con las ganas de escucharla hablar de la vida. Y que no puedo apartar los ojos de su mirada...
Y que me quedé con las ganas de escucharla hablar de la vida. Y que no puedo apartar los ojos de su mirada...
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