Servidor no entiende cómo la naturaleza empleó tres mil millones de años de evolución para que a un hombre le guste mirar a una mujer, y a una mujer mirar a un hombre, y solazarse en ello, para que ahora vengan esas manadas de clérigos diciendo que su dios particular no lo quiere. ¡Qué perdida de tiempo o que estrategia más malamente diseñada por el dios en cuestión! ¿No?
Servidor piensa que por aquí queda mucho fastasmón vendedor de humo místico con demasiado poder... y que no hace falta inmolarse para disfrutar de nueve huríes complacientes...
¡Que estamos en verano, puñetas!
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