Don Rafael García, el cura párroco de Villanueva de Bogas, un pueblo de Toledo, ha enviado una carta a sus feligreses para decirles que si no “objetan” la asignatura Educación para la ciudadanía, a sus hijos se les podrá negar la catequesis y, por tanto, podrían NO recibir la primera comunión... o sea, que se podrían quedar sin los maravillosos regalos, sin sus trajes de almirante o princesa, ni serán los centros del universo por un día... ¡con lo importante que es eso para los niños españoles! Pa servidor que este sujeto es –como poco- un pelín aguafiestas...
Pero no, no es una broma lo que está pasando, en realidad lo que hace ese cura aparentemente bonachón e inofensivo es un exponente más de la peligrosa sinrazón que representa la religión en las sociedades en las que ha calado desde hace siglos.
El cura párroco, como para dar fuerza a su amenaza coactiva, adjuntaba a su carta, otra del señor arzobispo de Toledo y cardenal primado de España, don Antonio Cañizares, en la cual, todos los obispos españoles se muestran empeñados en que los padres españoles boicoteen la nueva asignatura. En esta carta, entre otras cosas, se dice que:
"Esta Educación para la Ciudadanía es inaceptable (para los obispos) en la forma y en el fondo: en la forma, porque impone legalmente a todos una antropología que sólo algunos comparten y, en el fondo, porque sus contenidos son perjudiciales para eldesarrollo integral de la persona".
Respecto a la antropología (del matrimonio, que es de lo que hablan), resulta que los únicos que quieren imponer una antropología única, y los que no aceptan otros comportamientos sociales, son precisamente los curas catolicistas. La Educación para la Ciudadanía explica que la sociedad actual está por encima de los comportamientos intolerantes de la iglesia y su jerarquía... y enseña que los homosexuales que deciden vivir en matrimonio no son fenómenos de circo, ni seres malvados, ni enfermos mentales. Enseñar esto es enseñar tolerancia, concepto este que no pueden entender del todo los catolicistas, es decir, los que están en posesión de su Única Verdad Absoluta revelada por el mismísimo Dios... el resto de mortales, por tanto, estamos en el error.
Respecto al desarrollo integral de la persona. Este homo sapiens venido a menos no ha estudiado teología, y lo poco que ha estudiado ya lo tiene olvidado... pero se me ocurre un par de asuntos que realmente sí son perjudiciales para el desarrollo integral de la persona:
Es perjudicial para el desarrollo integral de la persona negar a nuestros niños el libre uso de la razón... por ejemplo, entre otras decenas de cosas, hacerles creer desde pequeños que una madre puede ser virgen.
Es perjudicial para el desarrollo integral de la persona castrar el espíritu crítico a nuestros niños mediante la negación sistemática de la duda.
Es perjudicial para el desarrollo integral de la persona adocenar a los niños en visiones mágicas de la realidad...
...pero hoy estoy aburrido de esta gente. Llevan dos mil años diciendo tonterías, los mismos dos mil años que los hombres les estamos haciendo caso ¡y hasta respetando! Pero son unos mentirosos porque los dioses no existen, y cualquier ideología basada en inexistencias o en seres volátiles es una necedad.
¡Sarta de imbéciles!
P.D. Lo siento, hoy he asistido a una misa y me ha vuelto a parecer un insulto a la inteligencia de cualquier hombre que use 1/3 de su cerebro. Y conste que ha sido un placer acompañar a mis amigos en ese lugar...
Mi queja y mi desprecio no es para las víctimas, los que hemos recibido el adoctrinamiento, están dirigidos hacia la jerarquía catolicista, es decir hacia los que ejercen un inmenso poder sobre las víctimas.
Pero no, no es una broma lo que está pasando, en realidad lo que hace ese cura aparentemente bonachón e inofensivo es un exponente más de la peligrosa sinrazón que representa la religión en las sociedades en las que ha calado desde hace siglos.
El cura párroco, como para dar fuerza a su amenaza coactiva, adjuntaba a su carta, otra del señor arzobispo de Toledo y cardenal primado de España, don Antonio Cañizares, en la cual, todos los obispos españoles se muestran empeñados en que los padres españoles boicoteen la nueva asignatura. En esta carta, entre otras cosas, se dice que:
"Esta Educación para la Ciudadanía es inaceptable (para los obispos) en la forma y en el fondo: en la forma, porque impone legalmente a todos una antropología que sólo algunos comparten y, en el fondo, porque sus contenidos son perjudiciales para eldesarrollo integral de la persona".
Respecto a la antropología (del matrimonio, que es de lo que hablan), resulta que los únicos que quieren imponer una antropología única, y los que no aceptan otros comportamientos sociales, son precisamente los curas catolicistas. La Educación para la Ciudadanía explica que la sociedad actual está por encima de los comportamientos intolerantes de la iglesia y su jerarquía... y enseña que los homosexuales que deciden vivir en matrimonio no son fenómenos de circo, ni seres malvados, ni enfermos mentales. Enseñar esto es enseñar tolerancia, concepto este que no pueden entender del todo los catolicistas, es decir, los que están en posesión de su Única Verdad Absoluta revelada por el mismísimo Dios... el resto de mortales, por tanto, estamos en el error.
Respecto al desarrollo integral de la persona. Este homo sapiens venido a menos no ha estudiado teología, y lo poco que ha estudiado ya lo tiene olvidado... pero se me ocurre un par de asuntos que realmente sí son perjudiciales para el desarrollo integral de la persona:
Es perjudicial para el desarrollo integral de la persona negar a nuestros niños el libre uso de la razón... por ejemplo, entre otras decenas de cosas, hacerles creer desde pequeños que una madre puede ser virgen.
Es perjudicial para el desarrollo integral de la persona castrar el espíritu crítico a nuestros niños mediante la negación sistemática de la duda.
Es perjudicial para el desarrollo integral de la persona adocenar a los niños en visiones mágicas de la realidad...
...pero hoy estoy aburrido de esta gente. Llevan dos mil años diciendo tonterías, los mismos dos mil años que los hombres les estamos haciendo caso ¡y hasta respetando! Pero son unos mentirosos porque los dioses no existen, y cualquier ideología basada en inexistencias o en seres volátiles es una necedad.
¡Sarta de imbéciles!
P.D. Lo siento, hoy he asistido a una misa y me ha vuelto a parecer un insulto a la inteligencia de cualquier hombre que use 1/3 de su cerebro. Y conste que ha sido un placer acompañar a mis amigos en ese lugar...
Mi queja y mi desprecio no es para las víctimas, los que hemos recibido el adoctrinamiento, están dirigidos hacia la jerarquía catolicista, es decir hacia los que ejercen un inmenso poder sobre las víctimas.
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